
octubre 2020 GRANJA ESCUELA EL ÁLAMO- MADRID
¡Hola! ¿Cómo estáis? Hace tiempo que no me paso por aquí, pero con todo el tema del COVID-19 y el estado de alarma, tengo que reconocer que no estamos haciendo muchos planes nuevos ni conociendo sitios para recomendaros. Espero que todo esto acabe pronto, ¡porque nos estamos volviendo locos!
Lo que sí que hicimos este fin de semana, fue conocer la Granja Escuela el Álamo (@granjaelalamo). Si vivís en Madrid o alrededores, probablemente os llevaran con el colegio de pequeños, ya que es una granja «de toda la vida» y un plan súper divertido para los niños.

Os cuento un poco en qué consiste el plan, ya que al enseñarlo en mi instagram (@alecorsini_b4living), fuisteis muchas las que me preguntasteis varias cosas al respecto, así que os explico todo para resolver dudas:
La Granja Escuela el Álamo y la Granja Infantil Giraluna pertenecen a la misma familia. Son dos granjas independientes, pero conectadas entre sí por un camino. Ambas están en Brunete, y El Álamo es «la hermana mayor de Giraluna».
Nosotros fuimos el año pasado a Giraluna, y es una monada también, pero esta vez teníamos reserva para conocer el Álamo.

Para poder asistir hay que reservar cita, ya que los grupos son reducidos y hay aforo dependiendo del horario. Cuesta 21€ por persona y los niños menores de 2 años no pagan.
El plan básicamente es ver animales y realizar alguna actividad. Cada grupo tiene un monitor, con el que vas paseando por las instalaciones y conociendo un poquito más a los animales. Hay de todo, desde avestruces, hasta gallinas, pasando por ciervos, cabras, conejos, ponis… ¡es genial! Con algunos incluso te puedes meter a tocarles y darles de comer.
Nos sorprendió lo bien cuidados y limpios que estaban los animales, se nota que es una empresa familiar y que son parte de la familia. Es muy agradable verles así. Animales tranquilos y felices de estar en su casa.
Después de dar un paseo, toca realizar la actividad. Dependiendo de la época del año, es una u otra. A nosotros por ir en otoño, nos tocó La Vendimia. Les ponen botas de agua a los niños y, ¡a pisar las uvas! Les divierte mucho y, mientras tanto, los padres disfrutamos de un mosto como aperitivo.

Más tarde pudimos subir a los niños a dar una vuelta en poni. Van bien sujetos por la monitor y un padre, y es muy seguro.

En cuanto a la comida, ahora por la pandemia, no ofrecen comida en la granja, si no que cada asistente tiene que llevar su propio picnic. Allí hay varias mesas al aire libre si hace bueno, y algunas en interior. Lo mejor es llevarse un bocadillo, o algo fácil para coger fuerzas y continuar con el día.
Una vez comidos, la ruta continuaba visitando la otra granja, Giraluna. Se accede por el campo, dando un paseo muy cortito. Allí visitamos las vacas, cerdo vietnamita y caballos, para después jugar dentro de sus setas coloridas y toboganes. A las 15.30 acabó nuestra ruta, aunque nos pudimos quedar un ratito más disfrutando de las instalaciones.

Lo pasamos genial, es un plan súper divertido para los niños y seguro por ser al aire libre. ¡Merece mucho la pena!
Muchísimas gracias de nuevo a la Granja por la invitación, ¡repetiría mil veces!
Espero que os guste, ¡contadme si vais!
0 comentarios